China batió el récord de lanzamientos, pero Galactic Energy recordó: el espacio no perdona errores.

La empresa privada china Galactic Energy sufrió un fallo en el lanzamiento del cohete Ceres-1: en la cuarta etapa se produjo una avería que impidió que tres satélites alcanzaran la órbita. Hasta ese momento el vuelo se había desarrollado con normalidad. El lanzamiento tuvo lugar el lunes a las 12:02, hora de Pekín, desde el cosmódromo de Jiuquan en la Región Autónoma de Mongolia Interior.
En un comunicado oficial la compañía precisó que el cohete «funcionó con normalidad hasta el fallo del motor de la cuarta etapa, que se apagó antes de tiempo». 510 segundos después de su encendido, el motor dejó de funcionar y la carga útil no alcanzó la altura prevista. Los ingenieros investigan la causa del fallo.
Para Ceres-1 fue el 22.º lanzamiento y solo el segundo fracaso en la historia del programa: de las misiones anteriores 20 se completaron con éxito y se pusieron en órbita 85 satélites comerciales.
Ceres-1 es un cohete de combustible sólido de cuatro etapas, de unos 20 metros de altura y 1,4 metros de diámetro. Su masa al despegue es de aproximadamente 33 toneladas, y su máxima carga útil alcanza los 350 kilogramos para colocarse en órbita terrestre baja. El modelo está diseñado para el transporte de pequeños satélites y se considera una de las principales herramientas operativas del sector espacial comercial chino.
El lanzamiento fallido se produjo poco después del exitoso despegue del cohete estatal «Long March 12», que tuvo lugar la noche anterior desde el cosmódromo de Wenchang en la isla de Hainan. Este vuelo colocó en órbita la decimotercera tanda de satélites para la megared nacional Guowang, concebida como el análogo chino de Starlink. La red está gestionada por el operador China SatNet y en el futuro debería incluir alrededor de 13 000 aparatos. Antes, cada misión llevaba 9 satélites, y el número total ya supera el centenar. Para 2027 China planea aumentar el número de satélites activos de Guowang hasta 400, proporcionándoles tanto comunicación comercial como comunicaciones estratégicas.
La pérdida de tres satélites no cambió la dinámica general de los lanzamientos espaciales chinos. En 2025 el país ya ha realizado 72 intentos de colocación en órbita, de los cuales solo 2 resultaron fallidos, y de ese modo batió su propio récord de número de lanzamientos.
Y a pesar del accidente, Galactic Energy no detiene su actividad. La compañía se prepara para el primer vuelo del cohete de combustible sólido más potente Ceres-2, cuyo lanzamiento se espera alrededor del 15 de noviembre. Además, los ingenieros realizaron recientemente una prueba de fuego exitosa de la primera etapa del cohete de combustible líquido Pallas-1 en el polígono de Haiyan. Estos desarrollos se financian con inversiones por 336 millones de dólares obtenidas en septiembre; es una de las mayores operaciones en la historia de las startups espaciales.