¿Podrá la empresa recuperar su antiguo esplendor? Analizamos en qué aspectos su nuevo producto supera a la competencia.

La empresa HTC, anteriormente muy popular en el mercado de dispositivos móviles, confía en una estrategia abierta en el campo de la inteligencia artificial (IA), para consolidarse en el mercado creciente de gafas inteligentes. HTC apuesta por la flexibilidad: su nuevo dispositivo VIVE Eagle permite a los usuarios elegir por sí mismos cuál de los modelos de IA disponibles utilizar. A diferencia de los competidores, que ofrecen soluciones basadas en un único motor, el fabricante taiwanés ha decidido no limitarse a una sola plataforma.
Las gafas VIVE Eagle, mostradas por primera vez en agosto, salieron a la venta en Hong Kong a un precio de unos 512 dólares estadounidenses. Ya en el primer trimestre del año que viene HTC planea ampliar la distribución: el dispositivo llegará a Japón y a países del sudeste asiático. Más adelante, en 2026, se espera el lanzamiento en Europa y en EE. UU.
HTC enfatiza que la concentración inicial en el mercado asiático no fue casual: en el desarrollo se tuvieron en cuenta las particularidades de la forma del rostro, y muchos modelos existentes en el mercado están adaptados a rostros europeos, lo que puede provocar incomodidad en los usuarios asiáticos.
En el plano técnico, VIVE Eagle es compatible con varias plataformas de IA populares, incluyendo desarrollos de Google y OpenAI. Este enfoque permite beneficiarse de las actualizaciones y del progreso en múltiples frentes a la vez. En comparación, las gafas de Meta están integradas exclusivamente con su propio sistema, y los fabricantes chinos, incluidos Xiaomi y Alibaba, confían en algoritmos nacionales creados conforme a los requisitos locales.
Aunque el lanzamiento en Hong Kong despertó interés sobre una posible entrada de HTC en el mercado continental, en la compañía señalan que la situación con los servicios de IA en China es mucho más compleja. Las soluciones extranjeras están limitadas allí, y las normas locales en materia de almacenamiento de datos requieren una infraestructura separada. HTC destaca que esto requerirá preparación adicional y tiempo.
Según datos de los analistas de Counterpoint, los envíos globales de gafas inteligentes crecieron un 110% en la primera mitad de este año. El líder indiscutible sigue siendo Meta, que controla el 73% del mercado gracias a sus modelos desarrollados conjuntamente con EssilorLuxottica. Estos dispositivos pueden contestar llamadas, tomar fotos y reproducir música, lo que los hace atractivos para una audiencia amplia. Sin embargo, el uso tan intensivo de datos personales para el entrenamiento de los servicios de IA suscita inquietud entre analistas y usuarios.
HTC destaca otro enfoque: según representantes de la empresa, la información de los usuarios no se utiliza para el entrenamiento de los modelos de IA. Protección de la privacidad y seguridad de los datos se anuncian como diferencias importantes respecto a los competidores.
El lanzamiento de VIVE Eagle también simboliza una nueva dirección en la estrategia de HTC, que anteriormente vendió parte de su división de dispositivos de realidad aumentada a Google por 250 millones de dólares. Ahora la empresa busca reivindicarse en el mercado de la electrónica de consumo.