Cientos de miles de usuarios pierden acceso a sitios populares; las autoridades se niegan a explicar las causas.
En España ya va por la segunda semana consecutiva la bloqueo no anunciado del servicio dinámico de DNS ddns.net de la empresa NO-IP. Los usuarios se quejan masivamente de la imposibilidad de conectarse a sus dispositivos y servicios, especialmente en situaciones en las que las direcciones IP cambian con frecuencia — por ejemplo, en el acceso remoto a cámaras de videovigilancia.
A diferencia de las interrupciones habituales, aquí se trata de una redirección deliberada de dominios a 127.0.0.1 — la dirección de la máquina local — lo que hace imposible la conexión. El operador Digi estuvo entre los primeros cuyo bloqueo fue confirmado. La causa es una resolución judicial, cuyos detalles no se divulgan.
Algunos abonados reciben respuestas escuetas que atribuyen la culpa a «causas externas» ajenas al operador. Así, Movistar muestra el «Error 451» con una formulación sobre motivos legales, MásOrange afirma que existe una «solicitud de la autoridad competente», y Vodafone reconoce únicamente que no puede influir en la situación. En la mayoría de los casos no se comunica ni el nombre del tribunal, ni el objeto de la demanda, ni la lista de recursos bloqueados.
El contexto de fondo es la creciente ola de bloqueos en Europa, que suelen dirigirse contra servicios de streaming pirata. A menudo esto va acompañado de desconexiones masivas de direcciones IP vinculadas a Cloudflare, lo que afecta también a recursos totalmente legítimos. En España estos cortes se producen con regularidad durante las transmisiones de fútbol, y en general no se avisa con antelación sobre posibles interrupciones. La falta de notificaciones, explicaciones y mecanismos para impugnar las medidas crea un efecto de vacío informativo total.
Los servicios DDNS están integrados en la mayoría de los routers modernos, incluidos los de ASUS, por lo que muchos ni siquiera sospechan que los usan. Según estimaciones aproximadas, alrededor de 350.000 subdominios están vinculados al dominio ddns.net, y cualquier restricción en su funcionamiento puede provocar una reacción en cadena de problemas. No obstante, en esta ocasión la restricción no pareció aplicarse a nivel de direcciones IP, sino solo al dominio, lo que permitió evitar un daño aún mayor.
Comprobar el bloqueo ayuda un portal externo, hayahora.futbol, que recopila datos sobre la disponibilidad de direcciones en distintas redes. Según sus informes, las restricciones continúan al menos en Digi y en algunos otros proveedores. Sin embargo, ninguna de las decisiones está respaldada por información pública oficial, lo que hace que la situación sea única incluso respecto a otros países europeos.
A pesar de las regulaciones activas en el marco de la Unión Europea, España en la práctica muestra un ejemplo de un nivel inaceptable de opacidad, cuando decenas de miles de usuarios quedan desconectados de servicios sin explicación ni posibilidad de recuperar el acceso.