La empresa Kagi ha lanzado la versión estable del navegador Orion 1.0 para macOS tras seis años de desarrollo. El proyecto comenzó como un experimento del fundador de Kagi, Vladimir Prelovac, y ahora forma parte del ecosistema "Kagiverse", que incluye búsqueda, asistente, navegador, traductor y servicio de noticias. Orion ya está disponible en Mac, iPhone y iPad, en alfa para Linux y se está desarrollando para Windows con planes de lanzamiento a finales de 2026.
Orion se presenta como una alternativa a los navegadores que monetizan con publicidad y recolección de datos. Los desarrolladores hacen hincapié en la "telemetría cero": el navegador no incluye analíticas integradas, identificadores ni sistemas de seguimiento; no usa tecnologías publicitarias o de rastreo, y la protección contra rastreadores y el bloqueo de contenido están activados por defecto. El equipo afirma directamente que considera el acceso privado a Internet como un derecho básico y construye un navegador que rinde cuentas únicamente ante el usuario, no ante los anunciantes.
Técnicamente, Orion se diferencia de la mayoría de competidores por no basarse en Chromium, sino en WebKit, el mismo motor que está detrás de Safari. Gracias a esto, los desarrolladores esperan evitar la "monocultura Chromium" y aprovechar mejor las optimizaciones para macOS e iOS. En apariencia el navegador resulta familiar para los usuarios de Safari, pero en su interior ofrece un sistema propio de extensiones, una personalización profunda de la interfaz y ajustes avanzados.
En el contexto de la moda de los "navegadores con IA", Kagi adopta una posición más conservadora respecto a la inteligencia artificial. En la empresa advierten sobre las vulnerabilidades de las implementaciones tempranas: API ocultas que permiten a agentes de IA ejecutar comandos locales y ataques mediante indicaciones maliciosas que fuerzan al agente a eludir las restricciones y filtrar datos sensibles. Por eso Orion 1.0 se lanza sin código de IA integrado en el núcleo: el navegador actúa como un entorno protegido al que, si es necesario, se conectan servicios externos de IA, incluidas las propias herramientas de Kagi, pero con una clara separación y bajo control del usuario, orientándose principalmente a empresas y usuarios profesionales a los que les importa la previsibilidad del comportamiento.
Al navegador se le han añadido varias funciones pensadas para usuarios que "viven en el navegador". El Modo de enfoque convierte cualquier sitio en casi una aplicación web autónoma sin elementos que distraigan. La vista previa de enlaces permite consultar rápidamente un enlace desde el correo, notas o mensajería sin saturar la sesión con nuevas pestañas. Perfiles separados con sus propias cookies, extensiones y ajustes permiten segregar cuentas de trabajo, personales y de aficiones. También hay configuraciones más finas de la interfaz, como minipanales y ajustes detallados de la visualización de páginas.
A pesar de la ambición funcional, en Orion trabaja un equipo de apenas seis desarrolladores. Según Kagi, el navegador se ha descargado más de un millón de veces y el proyecto cuenta con 2.480 suscriptores de pago. Orion sigue siendo gratuito, y el modelo de financiación sostenible se basa en la búsqueda de pago de Kagi y en el soporte opcional: se ofrecen donaciones, la suscripción Supporter por 5 dólares al mes o 50 al año, y el acceso de por vida por 150 dólares con funciones adicionales de Orion+.
Kagi promete seguir desarrollando Orion 1.0 con ajustes más profundos para usuarios avanzados, mejorar la estabilidad y el funcionamiento con aplicaciones web complejas, además de nuevas funciones para suscriptores. A medida que evolucione el ecosistema, planean integrar el navegador más estrechamente con los servicios inteligentes de Kagi, manteniendo al mismo tiempo el principio básico: sin IA impuesta en el núcleo y con el máximo control en manos del usuario.
