Hackers gemelos de un contratista del gobierno de EE. UU. habrían usado acceso oficial para sabotaje y robo de datos

El Departamento de Justicia de EE. UU. presentó cargos contra los hermanos gemelos Munib y Sohaib Akhter por que, tras ser despedidos de un contratista del gobierno federal, eliminaron 96 bases de datos con información sensible, incluidas actas de investigaciones y documentos correspondientes a solicitudes en virtud de la ley de libertad de información (FOIA), y por haber usado indicaciones de servicios de IA para ocultar rastros.
Según la investigación, los Akhter atacaron intencionadamente la infraestructura informática de su antiguo empleador, que prestaba servicios a varias agencias gubernamentales de EE. UU. Supuestamente los hermanos continuaron accediendo a los sistemas incluso después del despido, bloquearon el acceso a otros usuarios, destruyeron datos y trataron de borrar las huellas. La acusación fue presentada el 13 de noviembre.
El episodio más grave, según los fiscales, ocurrió el 18 de febrero. Ese día Munib supuestamente eliminó alrededor de 96 bases de datos, incluidas las carpetas FOIA y materiales de investigaciones sensibles. Apenas un minuto después de borrar una de las bases perteneciente al Departamento de Seguridad Nacional (DHS), según la investigación, recurrió a una herramienta basada en inteligencia artificial para preguntar cómo limpiar los registros del sistema. Los investigadores consideran esto una indicación directa de un intento de ocultar pruebas.
En la correspondencia incorporada al expediente, los hermanos también discutían cómo 'ordenar' la casa en caso de una visita de las fuerzas del orden. Los portátiles de la empresa que aún tenían en su poder tras el despido fueron completamente limpiados antes de devolverlos al empleador.
En una acusación separada, Munib enfrenta cargos por acceso no autorizado a datos del Servicio de Impuestos Internos de EE. UU. (IRS). Según el Departamento de Justicia, accedió a los registros fiscales federales de al menos 450 personas. Sohaib, a su vez, está acusado de haber facilitado la contraseña que permite el acceso a un sistema gubernamental, lo cual por sí mismo constituye un delito federal.
La lista de cargos contra Munib incluye conspiración para cometer fraude informático, destrucción de registros, robo de datos gubernamentales y robo de datos personales con circunstancias agravantes. En conjunto, enfrenta hasta 45 años de prisión. A Sohaib se le imputan conspiración, destrucción de registros y la entrega de la contraseña que puede usarse para penetrar un ordenador gubernamental; la pena máxima por sus cargos es de hasta 6 años.
En el Departamento de Justicia declararon que los hermanos traicionaron la confianza al pasar al otro lado de la barrera: de contratistas, a los que se les confió trabajar con datos estatales sensibles, a acusados de socavar procesos gubernamentales críticos. No obstante, los Akhter siguen siendo formalmente inocentes hasta que se demuestre su culpabilidad en un tribunal.