Microsoft abre WinUI... pero primero desentrañará todo lo que nadie debía ver

El equipo del framework WinUI para Windows ha anunciado el inicio de la transición hacia una apertura completa del código fuente. Según explicó Beth Pan, ingeniera sénior de Microsoft, el proyecto entra en una fase activa de transformación: en lugar de los espejos parciales actuales, se planea la publicación íntegra del repositorio principal y toda su infraestructura. Todavía no hay un calendario preciso, ya que gran parte del framework está profundamente integrada con componentes cerrados de Windows que requieren ser aislados o refactorizados previamente.

WinUI 3 surgió como parte de la iniciativa Project Reunion, lanzada en 2020 para reconciliar dos mundos enfrentados: los defensores de la clásica API Win32 y los partidarios de la Universal Windows Platform (UWP), introducida con Windows 10. Más tarde, el proyecto evolucionó hacia el Windows App SDK (WASDK), convirtiéndose en una pila unificada para el desarrollo de aplicaciones de usuario. WinUI es compatible con el sistema visual Fluent Design, que se aplica tanto en interfaces de escritorio como web y móviles.

Hasta hace poco, el código fuente de WinUI solo se publicaba de forma esporádica en GitHub, mientras que el repositorio principal permanecía como un recurso interno de Microsoft. Según Pan, la transición se realizará en cuatro etapas: primero aumentará la frecuencia de sincronización con la copia pública, luego los desarrolladores podrán compilar el proyecto por su cuenta, después se habilitará el soporte para pull requests y pruebas locales. El paso final será trasladar por completo el desarrollo principal al repositorio abierto de GitHub.

El principal obstáculo son las dependencias del sistema profundamente incrustadas en el código, las cuales no pueden ser abiertas al público. Los ingenieros tendrán que realizar un trabajo intenso de descomposición de esas capas o separarlas en bibliotecas independientes antes de que el repositorio esté listo para su publicación. Pan reconoció que esta fue precisamente la razón que frenó el progreso en los últimos años.

Los miembros experimentados de la comunidad recibieron la noticia con cauteloso optimismo. Muchos apoyaron la idea, pero expresaron dudas sobre si Microsoft realmente está dispuesta a invertir recursos significativos en el desarrollo de WinUI. Entre las principales críticas están la ausencia de un diseñador visual en Visual Studio, la lentitud en la corrección de errores y problemas sin resolver como la inestabilidad de las ventanas modales y la falta de una validación completa de entradas de usuario.

Algunos comentarios fueron abiertamente críticos. Un desarrollador confesó que durante años invirtió esfuerzos en el ecosistema de WinUI, pero ahora se siente traicionado: «Microsoft no entiende el daño que ha causado a los evangelistas, a la comunidad de desarrolladores y a las empresas que confiaron en una promesa vacía, en medio de la estancada evolución de WinRT, UWP y WASDK». Otro incluso cuestionó toda la base del proyecto: «El concepto de WinRT y luego WinUI fue un error desde el principio».

Estas opiniones remiten al período posterior al lanzamiento de Windows 8, cuando la compañía presentó Windows Runtime (WinRT), un modelo alternativo con soporte para C++, .NET y otros lenguajes mediante mecanismos de proyección. Fue entonces cuando comenzó la fragmentación del entorno de desarrollo: surgieron pilas paralelas, desapareció una dirección clara y la elección de herramientas se volvió compleja.

A pesar de las críticas, la apertura del código de WinUI sigue siendo un paso largamente esperado. No obstante, como subrayan los miembros de la comunidad, el factor clave no será la declaración pública, sino el respaldo real: «¿Cuántos ingenieros trabajan realmente en WinUI y WinAppSDK?» — se pregunta uno de los desarrolladores. «Parece que todo el enfoque está en la web, y lo demás sobrevive solo por respeto al pasado».