Géiseres, metano y un océano: Europa enviará una misión para buscar vida bajo el hielo de Encélado

Géiseres, metano y un océano: Europa enviará una misión para buscar vida bajo el hielo de Encélado

¿Tras 16 años, por fin conoceremos la verdad?

image

La Agencia Espacial Europea (ESA) anunció planes para lanzar una misión al satélite helado de Saturno, Encélado, en el marco del programa Voyage 2050. El objetivo del proyecto es estudiar en detalle el océano subterráneo y buscar posibles signos de vida extraterrestre.

Entre 2005 y 2015 la sonda Cassini de la NASA sobrevoló Encélado varias veces y registró gigantescos chorros de hielo y vapor de agua que brotaban de las grietas del polo sur. Estas observaciones fueron una prueba directa de la existencia de un extenso océano bajo la capa de hielo, lo que convierte a Encélado en uno de los objetos más prometedores para la astrobiología.

La ESA confirmó su intención de desarrollar una misión que incluiría una nave orbital y un módulo de descenso. El orbitador no será solo un retransmisor, sino una plataforma de investigación completa capaz de recoger y analizar las partículas expulsadas del interior de Encélado junto con los géiseres helados. Se sabe que estas expulsiones pueden alcanzar dimensiones colosales: en 2023 el telescopio James Webb registró un chorro de más de 10 000 kilómetros de longitud que se extendía lejos en el espacio.

Según Jörn Helbert del Centro Europeo de Investigación y Tecnología Espacial (ESTEC), el grupo de trabajo de la ESA está elaborando desde marzo los requisitos científicos y de ingeniería clave. En el plan preliminar figura un lanzamiento en 2042 mediante dos cohetes pesados Ariane 6, y la llegada a Encélado se espera para 2053. Tras una serie de sobrevuelos, el módulo de descenso debería efectuar un aterrizaje suave en la superficie alrededor de 2058.

La razón principal para elegir Encélado son sus condiciones únicas. Según Helbert, el satélite combina tres criterios necesarios para la existencia de vida: la presencia de agua líquida, elementos químicos y una fuente de energía procedente del Sol. En 2021 un grupo de investigadores publicó en Nature Astronomy los resultados de un análisis que indican que la inusualmente alta concentración de metano en los chorros de Encélado solo puede explicarse por procesos biológicos. Ningún mecanismo abiológico conocido puede reproducir esos volúmenes de gas expulsados por las grietas características de la superficie, llamadas 'franjas tigre'.

Sin embargo, comprobar la hipótesis sobre la existencia de formas de vida subterráneas es una tarea extremadamente compleja. Confirmarla requerirá décadas de trabajo con nuevos instrumentos y mediciones directas. No obstante, las futuras misiones a Encélado y a otro satélite helado, Europa, podrían cambiar radicalmente las ideas sobre el origen y la distribución de la vida en el universo. Incluso el hallazgo de formas microbianas dentro del Sistema Solar aumentaría considerablemente la probabilidad de que existan civilizaciones inteligentes fuera de él.

No esperes a que los hackers te ataquen: ¡suscríbete a nuestro canal y conviértete en una fortaleza impenetrable!

Suscribirse