No hace falta un plan sofisticado para provocar un apagón total: basta con un solo descuido.

Cloudflare publicó su informe trimestral, en el que se recopilan los casos más inusuales y graves de interrupciones del funcionamiento de internet en todo el mundo. De julio a septiembre de 2025 se registraron fallos por múltiples causas —desde desastres naturales y desconexiones por orden de las autoridades hasta daños en cables por maquinaria vial y problemas en redes satelitales.
La compañía indica que durante el tercer trimestre se observó una amplia gama de causas de desconexión —desde la suspensión del acceso a la red por órdenes gubernamentales en Sudán, Siria, Irak y Venezuela hasta interrupciones causadas por terremotos, incendios, trabajos de emergencia y ciberataques.
A pesar de la diversidad de escenarios, muchos ya resultan familiares: en varios países, incluidos Irak, Siria y Sudán, se volvió a recurrir al bloqueo temporal de internet durante los días de exámenes escolares. En Siria las autoridades incluso informaron sobre la eliminación de redes de fraude tecnológico usadas para copiar en exámenes. Cloudflare señala que la naturaleza de tales desconexiones encaja en un patrón previamente registrado de interrupciones diarias de corta duración que se prolongaron durante varios días.
Venezuela enfrentó una variante administrativa menos común. El proveedor local SuperCable fue desconectado tras la anulación de su licencia, lo que provocó la desaparición total del acceso el 18 de agosto. La conexión no se restableció antes del fin del trimestre. En otros países los problemas fueron con más frecuencia de carácter infraestructural.
Así, en la República Dominicana y en Angola los cortes de fibra óptica fueron causados por trabajos en las carreteras, lo que afectó la disponibilidad de la red durante horas. En Angola, según organizaciones no gubernamentales locales, dichas interrupciones podrían haberse usado para limitar la actividad de las protestas. En Haití una doble rotura de fibra óptica redujo el tráfico de Digicel en un 80 por ciento. Problemas similares afectaron a operadores en los Emiratos Árabes Unidos y Pakistán, donde se dañaron simultáneamente cables submarinos en la zona del Mar Rojo.
Los problemas tampoco evitaron a EE. UU. En Texas, cerca de Dallas, el 26 de septiembre un cable fue perforado por una bala perdida, lo que provocó una desconexión de dos horas para los abonados de Spectrum. A pesar de la brevedad del incidente, volvió a subrayar la fragilidad de la infraestructura terrestre.
Entre las catástrofes causadas por el hombre y la naturaleza el informe destaca un incendio en la central de comunicaciones Ramses en Egipto, que afectó a Vodafone, Orange y otros operadores. Además, un fuerte terremoto de magnitud 8,8 en Kamchatka provocó una caída brusca del tráfico en la región, con algunas redes registrando una reducción del volumen de datos transmitidos de más del 75 por ciento. La recuperación fue gradual.
En Yemen, el 11 de agosto, un ataque cibernético dirigido contra la red YemenNet, controlada por los hutíes, redujo el volumen de tráfico a la mitad en cuestión de minutos. Las interrupciones afectaron no solo a las conexiones de abonados por ADSL, sino a todo el enrutamiento, con una disminución de casi el 40 por ciento en el número de bloques de IP anunciados.
Incluso los sistemas orbitales resultaron vulnerables. La red satelital Starlink de SpaceX sufrió una interrupción global el 24 de julio, que la compañía atribuyó a un error interno de software que alteró el funcionamiento de servicios de red clave. Así lo informó uno de los vicepresidentes de SpaceX, quien confirmó el incidente en la red social X.
Cloudflare subraya que el panorama incluye solo los eventos que fueron confirmados y observados dentro de su infraestructura de red. El informe no pretende ser exhaustivo, pero ilustra claramente lo fácil que todavía puede ser, incluso en 2025, que internet resulte inaccesible —por la acción de un funcionario, la maquinaria de construcción o un incidente imprevisible.