El hackeo es solo maximalismo juvenil: conclusiones inesperadas de las autoridades de los Países Bajos

El hackeo es solo maximalismo juvenil: conclusiones inesperadas de las autoridades de los Países Bajos

¿Por qué incluso los delincuentes más temerarios abandonan su oficio tras 20 años?

image

Las autoridades de los Países Bajos publicaron datos que muestran que la implicación de los adolescentes en delitos digitales suele ser de carácter temporal. Un análisis preparado por la Cámara de Representantes indica que el interés temprano por las intrusiones informáticas suele desaparecer ya hacia los veinte años, y que solo unos pocos mantienen un interés sostenido.

El informe subraya que los adolescentes prueban distintos tipos de conductas ilícitas aproximadamente a la misma edad. Los delitos digitales no son más frecuentes que los casos relacionados con armas o drogas, y son notablemente menos comunes que los delitos contra la propiedad. Además, el camino hacia los primeros intentos suele pasar por simulaciones de juego que permiten adquirir habilidades técnicas.

Según datos recopilados en distintos años, el pico de actividad de los jóvenes infractores fluctuó entre los diecisiete y los veinte años. La tendencia coincide con la de otros tipos de delitos. En uno de los estudios realizado en 2013 con una muestra de varios cientos de jóvenes infractores, la mayoría de los participantes abandonó esa actividad poco después de alcanzar el pico.

La proporción de quienes no renuncian a los delitos digitales después de los veinte años se estima en aproximadamente cuatro por ciento. La investigadora Alisa Hutchings ya señaló en 2016 que la implicación a largo plazo se forma por un interés sostenido en la tecnología y el deseo de desarrollar habilidades, no por estímulos externos.

Los autores del análisis gubernamental señalan que la mayoría de los estudios queda obsoleta debido a los rápidos cambios en el entorno digital. Para comparar, se presentan datos sobre las pérdidas sociales totales por la delincuencia juvenil: alrededor de 10,3 mil millones de euros al año. La carga principal recae sobre las víctimas, y el resto sobre los servicios públicos, incluida la policía y el sistema judicial.

Es difícil estimar los costes anuales exactos atribuibles específicamente a los delitos digitales por la falta de observaciones a largo plazo. Sin embargo, datos indirectos permiten evaluar la magnitud del problema. Por ejemplo, un estudio encargado por el gobierno del Reino Unido mostró que el daño anual de tres ataques a un gran hospital puede superar los 11 millones de libras. Cantidades similares son comparables o superan los costes de muchas categorías de delitos en los Países Bajos.

Anteriormente, las autoridades del país han indicado en varias ocasiones que el impacto de los ataques digitales es difícil de expresar en cifras exactas. Por ejemplo, un informe preparado por Deloitte en 2016 para las autoridades neerlandesas estimó las pérdidas anuales de las organizaciones por ciberincidentes en aproximadamente 10 mil millones de euros, una magnitud comparable al daño total de la delincuencia juvenil.

¿Estás cansado de que Internet sepa todo sobre ti?

¡Únete a nosotros y hazte invisible!