Miles de iraníes se quedan sin dinero tras un ciberataque de represalia
Una sombra digital se cierne sobre la economía iraní.
El grupo hacktivista Predatory Sparrow, también conocido por su nombre persa «Gonjeshke Darande», declaró haber llevado a cabo un ciberataque masivo contra el banco iraní Sepah el pasado 17 de junio. Según sus afirmaciones, durante el ataque se destruyó información crítica relacionada con las operaciones de la entidad, la cual los atacantes vinculan directamente con el Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (IRGC).
El grupo explicó que eligieron como objetivo el Bank Sepah porque, según ellos, desempeña un papel clave en eludir sanciones internacionales y financiar “proxies terroristas”, proyectos de misiles balísticos y el programa nuclear militar de Irán. Destacan, además, que no se trata de fondos estatales, sino del dinero de los ciudadanos iraníes, lo que convierte —según su narrativa— esta operación en un acto de justicia.
El medio independiente Iran International informó de importantes fallos en el sistema bancario del país. Varias sucursales del Bank Sepah fueron cerradas y los clientes no pudieron acceder a sus cuentas. Un usuario compartió imágenes de cajeros automáticos iraníes mostrando mensajes de error en sus pantallas.
No ha sido posible verificar de forma independiente las afirmaciones del grupo —los expertos intentaron contactar con el Bank Sepah a través de los canales oficiales iraníes, pero los correos electrónicos fueron devueltos con errores. Tampoco se logró establecer comunicación con las sedes del banco en el Reino Unido e Italia. Predatory Sparrow, por su parte, no ofreció comentarios adicionales.
El incidente se produce en un momento de creciente tensión entre Israel e Irán. En los últimos días, Israel ha lanzado ataques contra infraestructuras iraníes, incluyendo instalaciones nucleares, bases militares y altos mandos. Esto da mayor peso a la hipótesis de que el ataque al banco forme parte de una campaña coordinada contra los pilares estratégicos del Estado iraní.
La identidad de los responsables detrás de Predatory Sparrow sigue siendo desconocida. Sin embargo, los expertos en ciberseguridad consideran que sus acciones son verídicas y altamente efectivas. Según afirma un analista de Mandiant, el grupo no solo emite mensajes agresivos, sino que también demuestra una eficacia técnica real. El exfuncionario de la NSA, Rob Joyce, recordó que ataques anteriores de Predatory Sparrow contra plantas metalúrgicas y estaciones de servicio en Irán causaron interrupciones graves, incluidos incendios y paralización de infraestructuras. Este nuevo ataque podría ser una continuación de esa campaña de presión sobre objetivos estratégicos del Estado iraní —esta vez, a través del sistema financiero.