El gobierno por fin ha ideado cómo impedir que el silicio cruce la frontera.
Las autoridades estadounidenses planean dotar a los chips de capacidades de geolocalización —no por logística, sino para reforzar el control sobre el suministro de equipos capaces de acelerar el desarrollo de la inteligencia artificial. Según Bloomberg, la administración de EE. UU. está discutiendo posibles cambios tanto de hardware como de software en la arquitectura de los semiconductores, que permitirían rastrear la ruta y la ubicación final de productos como las GPU de NVIDIA.
El objetivo principal de la iniciativa es impedir que aceleradores de alto rendimiento lleguen al mercado chino eludiendo las restricciones de exportación. Michael Kratsios, uno de los principales arquitectos del reciente plan presidencial sobre IA, confirmó que la Casa Blanca trabaja en esta dirección y expresó interés en colaborar con la industria, aunque por el momento no se han iniciado negociaciones directas con NVIDIA ni AMD.
Paralelamente, en mayo ambas cámaras del Congreso presentaron proyectos de ley que obligan al Departamento de Comercio a introducir el requisito de que los microchips avanzados y los dispositivos que los contienen estén equipados con sistemas de verificación de ubicación. Estos mecanismos deberían activarse si el producto termina en lugares prohibidos, y los fabricantes estarían obligados a notificar al Buró de Industria y Seguridad (BIS) si detectan intentos de eludir o interferir con los rastreadores.
Aún no se han revelado los detalles técnicos del sistema propuesto. Ninguno de los proyectos de ley especifica cómo se implementará la verificación de ubicación —ya sea mediante módulos integrados, telemetría por software u otros métodos. Sin embargo, una fuente de la Casa Blanca confirmó que se están evaluando distintos enfoques, incluyendo modificaciones físicas a los chips.
Para Pekín, esta iniciativa podría sonar como una señal directa de desconfianza. Anteriormente, los reguladores chinos ya habían convocado a representantes de NVIDIA para exigir explicaciones sobre el modelo H20, diseñado específicamente para cumplir con las normas de exportación chinas. En aquella ocasión, las autoridades expresaron su preocupación de que los aceleradores pudieran contener puertas traseras de hardware, lo que permitiría a los servicios de inteligencia estadounidenses monitorear el funcionamiento de los equipos o incluso desactivarlos de forma remota.
Los intentos de EE. UU. por establecer un control más estricto sobre la distribución de chips de IA avanzados responden a filtraciones que indican que GPU de NVIDIA por valor de cerca de mil millones de dólares, prohibidas para la exportación, habrían llegado al mercado negro chino. Los analistas estadounidenses advierten cada vez con más frecuencia que la ventaja de EE. UU. en el campo de la IA se está reduciendo y podría ser de solo uno o dos años. El control sobre la infraestructura de cómputo se ha convertido, en esencia, en una cuestión de seguridad nacional.
En este contexto, los senadores Elizabeth Warren (demócrata, Massachusetts) y Mike Rounds (republicano, Dakota del Sur) enviaron una carta conjunta al secretario de Comercio Howard Latnick y al secretario de Estado Marco Rubio, instándolos a no relajar las restricciones relacionadas con la exportación de infraestructura de IA. Enfatizan que el liderazgo tecnológico de EE. UU. no se basa únicamente en los algoritmos, sino también en los enormes centros de datos construidos dentro del país, y su traslado —incluso bajo la tentación de generosas subvenciones extranjeras— podría resultar en la pérdida de la iniciativa estratégica.
Las autoridades piden endurecer las disposiciones de la futura norma que reemplazará a la llamada Diffusion Rule, con el fin de prohibir o restringir seriamente la instalación de infraestructura crítica de IA fuera del territorio estadounidense. En su formulación, "la IA es infraestructura", y debe permanecer en suelo nacional. De lo contrario, advierten, el eje del desarrollo global podría inclinarse a favor de los competidores.