Sin salir de casa — un troll rumano lanzó al SWAT contra la élite de Washington

Tomaș Szabo, ciudadano rumano de 26 años, se declaró culpable de una serie de amenazas falsas de tiroteos y atentados que afectaron a decenas de altos funcionarios de EE. UU. Según el Departamento de Justicia estadounidense, desde finales de 2023 hasta principios de enero de 2024, Szabo lideró un grupo responsable de una oleada de swatting: llamadas falsas a servicios de emergencia denunciando amenazas inminentes para provocar el despliegue de fuerzas especiales como SWAT.

De acuerdo con la investigación, Szabo y sus cómplices enviaron alertas falsas de bombas o tiroteos dirigidas al menos contra 25 miembros del Congreso y sus familias, varios secretarios del gabinete, así como al menos 13 funcionarios actuales o anteriores de agencias federales, incluidos directores de organismos de seguridad.

También fueron blanco jueces federales, 27 funcionarios estatales y sus allegados, al menos cuatro organizaciones religiosas y varios periodistas. En uno de los episodios, en diciembre de 2023, una llamada anónima sobre un tiroteo movilizó a la policía hasta la casa de Jen Easterly, directora de la CISA, en Arlington, Virginia, tras una falsa denuncia de intercambio de disparos en su vecindario.

Las autoridades concluyeron que Szabo no solo coordinaba al grupo, sino que también participaba activamente en las operaciones, sirviendo como ejemplo y promoviendo la repetición de su método. Su implicación se remonta a enero de 2021, cuando amenazó con un atentado en el Capitolio con la intención de asesinar al entonces presidente electo Joe Biden.

En noviembre de 2024, Szabo fue extraditado desde Rumanía. Como parte de un acuerdo con la fiscalía, se declaró culpable de dos cargos: conspiración y amenazas relacionadas con el uso de explosivos. Estos delitos conllevan una pena máxima de hasta 15 años de prisión. La sentencia definitiva se dictará el 23 de octubre.