«La maquetación ya no se descolocará», aseguran los desarrolladores de la nueva versión de LibreOffice

«La maquetación ya no se descolocará», aseguran los desarrolladores de la nueva versión de LibreOffice

La compatibilidad alcanzó el nivel con el que se había soñado durante muchos años.

image

Lanzamiento reciente LibreOffice 25.8 promete convertirse en una de las versiones más fiables y rápidas en la historia del proyecto. La actualización no trae una revolución, pero sí muchas mejoras bien pensadas orientadas a aumentar la estabilidad, el rendimiento y la compatibilidad. Es un paso lógico para un producto maduro, cuya historia se remonta al editor de texto StarWriter para Amstrad CPC, aparecido hace 40 años en Alemania.

Entre los cambios clave está una notable aceleración en el arranque y en el funcionamiento: los documentos en Writer y las hojas en Calc ahora se abren más rápido, el desplazamiento es más fluido y la interfaz responde con mayor agilidad. Se ha puesto especial atención en mejorar la compatibilidad con los formatos de Microsoft Office: .DOCX, .XLSX y .PPTX ahora se importan con mayor precisión. El tratamiento de los guiones se ha afinado, el trabajo con las fuentes se acerca al de PowerPoint, y las hojas de cálculo en Calc han recibido más de una docena de funciones nuevas, lo que facilita el trabajo con archivos de Excel.

Una de las sorpresas más inesperadas es la compatibilidad con la exportación al formato PDF 2.0. Aunque este estándar se adoptó ya en 2017, su implementación en LibreOffice ha sido posible solo ahora. Con la nueva versión, los usuarios pueden crear documentos con firma digital y cifrado que cumplen los requisitos de seguridad actuales.

Además, al iniciar LibreOffice 25.8 por primera vez, a los usuarios se les ofrece elegir entre la interfaz clásica y la cinta al estilo Microsoft Office. Esta opción ya existía antes, pero ahora se promociona con más fuerza como alternativa, especialmente para quienes migran desde paquetes ofimáticos propietarios.

Algunos rastros de integración con herramientas de IA, que se han vuelto casi obligatorias en los productos modernos, sí están presentes, pero no dominan: por defecto están desactivadas y se pueden ignorar con facilidad. Desde hace varias versiones, LibreOffice incluye la posibilidad de usar DeepL para traducción automática y LanguageTool para la corrección ortográfica, también en el contexto de Collabora CODE.

LibreOffice sigue siendo una solución multiplataforma: funciona en Windows, Linux, macOS y FreeBSD, y es probable que OpenBSD actualice pronto su compilación. Sin embargo, los requisitos del sistema han cambiado: se ha dejado de dar soporte a versiones obsoletas de Windows (7, 8.0 y 8.1). Ahora se requiere como mínimo Windows 10, y solo se ofrecen versiones de 64 bits — tanto para x86-64 como para Arm64. Además, esta es la última edición compatible con macOS 10.15 Catalina.

Para estudiar en detalle todas las novedades, puede consultarse las notas de la versión oficiales.

LibreOffice 25.8 no intenta sorprender con cambios radicales, pero sin duda refuerza su posición como una alternativa fiable y madura a los paquetes ofimáticos comerciales — especialmente para quienes valoran los estándares abiertos, la autonomía y el control sobre sus propios datos.

Tu privacidad está muriendo lentamente, pero nosotros podemos salvarla

¡Únete a nosotros!